Real

Eran las ocho y media, ya había oscurecido. Rocío me acompaño hasta la parada del colectivo, la salude con un beso en la mejilla y me despedí de ella. Pare el colectivo, -Por favor $1,50- me senté en el tercer asiento.

Luego de un par de cuadras y de mirar por la ventana vi subir a un hombre que llevaba puesto una campera azul inflable, un portafolios, y en su otra mano llevaba un paquete de galletitas que no dejaba de comer, también un pantalón azul gastado y unas zapatillas que se veían limpias pero eran viejas por los agujeros en los costados. Me llamo demasiado la atención ese hombre, se veía realmente muy cansado y desganado. Habló con el chofer dos palabras y solo se que el contesto –Uno diez hasta Centenario Uruguayo ¿Dónde vas?- el hombre contesto uno diez y se sentó en el primer asiento, este al encontrar un asiento vacío, ansioso y contento siguió comiendo sus galletitas. Yo no podía dejar de observar sus gestos, su manera de mirar a las personas que había a su alrededor, es mas se puede decir que como miraba parecía que veía todo muy raro.

Seguí mirando por la ventana. Afuera se veían calles muy oscuras y muy poco iluminadas, calles rotas y muchos árboles, que cubrían las pocas casas que habían allí alumbradas. Saque de mi bolso negro un mp4 y me puse a escuchar lucy in the sky with diamonds cancion de the beatles, se podría decir que una de mis favoritas. Comencé a escuchar que el hombre se quejaba de que se le había acabado su paquete de galletitas, el colectivero solo dijo – Señor acá es Centenario Uruguayo ¿baja acá?- El hombre respondió y dijo – Yo solo quiero ir a mi casa -. daba la sensación de que estaba perdido, luego de 3 cuadras bajo y empezó a caminar por las calles oscuras por las que habíamos pasado con el colectivo, volví a ponerme los auriculares y seguí mirando por la ventana, solo faltaban cuatro cuadras para llegar a la esquina de mi casa y bajar. Apague el mp4 y lo guarde en mi bolso.